Solzhenitsyn

“Los dirigentes bolcheviques que tomaron Rusia no eran rusos, ellos odiaban a los rusos y a los cristianos. Impulsados por el odio étnico torturaron y mataron a millones de rusos, sin pizca de remordimiento… El bolchevismo ha comprometido la mayor masacre humana de todos los tiempos. El hecho de que la mayor parte del mundo ignore o sea indiferente a este enorme crimen es prueba de que el dominio del mundo está en manos de sus autores“. Solzhenitsyn

Izquierda-Derecha

El espectro político Izquierda-Derecha es nuestra creación. En realidad, refleja cuidadosamente nuestra minuciosa polarización artificial de la sociedad, dividida en cuestiones menores que impiden que se perciba nuestro poder - (La Tecnocracia oculta del Poder)

jueves, 14 de octubre de 2010

Ex agentes de la DEA norteamericana y del MI-5 británico destapan la verdad sobre el tráfico de drogas

Una generación ávida de experimentar, deseosa de conectarse con otras realidades, cayó en la trampa tendida por el gobierno en la sombra para desactivar a una juventud ansiosa de libertad. La estrategia que los psicólogos del gobierno oculto tendieron a esos jóvenes deseosos fue la de la prohibición: “si algo está prohibido, es bueno”, fue el razonamiento que hicieron muchos jóvenes idealistas de finales del siglo XX. Y allí se lanzaron.

El ex agente del servicio secreto británico James Casbolt relató cómo se originó el tráfico de drogas moderno en el que estuvo envuelto su propio padre: “los servicios de espionaje británicos diseñaron y crearon la cultura del LSD en los años 50 a través de instituciones como el Instituto Tavistock de Relaciones Sociales, en Londres.

En los sesenta, el MI5, MI6, y la CIA usaron el LSD como arma contra los activistas sociales que se convirtieron en niños de las flores, demasiado empanados con los tripis para organizar la revolución”.

Puede resultar una sorpresa para muchos que el mercado mundial de la droga esté controlado y dirigido por las agencias de espionaje. En este ‘mercado’, los servicios de inteligencia británicos mandan sobre los demás.