El estado dentro del estado: los grandes terroristas

Escrito por el Prof. Peter Dale Scott

Lo impensable – que elementos dentro del estado conspirarían con criminales para asesinar a civiles inocentes – ya no solo puede pensarse sino que es habitual en el pasado siglo. Por ejemplo en la Argelia francesa, donde elementos disidentes del Ejército francés, contrarios a los planes del General de Gaulle para la independencia de Argelia, organizaron la Secret Army Organization y atentaron indiscriminadamente contra civiles, incluyendo ataques a hospitales y escuelas.

Alexander Litvinenko, asesinado en Londres en Noviembre del 2006, dijo que los ataques a los apartamentos en Moscú en el año 1999, atribuidos a separatistas chechenos, fueron obra de los servicios secretos rusos (FSB).

Ataques similares en Turquía sugieren que existe un estado dentro del estado – una combinación de fuerzas, que van desde miembros tipo la organización Gladio, a "una vasta matriz de funcionarios de seguridad e inteligencia, miembros ultranacionalistas de los bajos fondos turcos y miembros renegados del PKK [separatistas kurdos].
Este estado dentro del estado, se financia en parte con el tráfico de heroina en Turquía, y ha sido acusado de asesinar a miles de civiles. Los ataques, inicialmente se atribuyeron al PKK, pero han resultado ser obra de los servicios de inteligencia y fuerzas paramilitares turcas, junto a un antiguo miembro del PKK. El 23 de abril del 2008, el antiguo Ministro del Interior Mehmet Agar se le inició un proceso judicial por su papel en la guerra sucia de los años 90.

En el libnro The Road to 9/11, se argumenta que han existido, al menos desde la 2ª Guerra Mundial, un estado dentro del estado en los EEUU, combinando funcionarios de la inteligencia con elementos del tráfico de drogas. También se señalan décadas de colaboración entre el estado dentro del estado y al-Qaeda, cuya implicación en el tráfico de drogas se ha ocultado en la Comisión del 9/11 Commission y en la prensa dominante.

Aún se debe explicar el hecho anómalo de que el principal instructor de vuelo de los secuestradores del 9/11, Ali Mohamed, era simultáneamente un agente doble del FBI. No se niega que Ali Mohamed organizó el atentado de la Embajada de los EEUU en Kenya.

Con estos antecedentes de colaboración, se puede establecer una hipótesis: el estado dentro del estado americano está de algún modo implicado con al-Qaeda en la atrocidad del 9/11; y que eso ayuda a explicar la evidente implicación de la CIA y otras agencias de los EEUU en el encubrimiento.

Sibel Edmonds, la Turco-Americana ex-traductora del FBI, ha relacionado públicamente tanto a al-Qaeda como a funcionarios Americanos con el tráfico de heroína turco. Según explica ella, Al Qaeda, se financia en un 95% por el dinero de la droga, el opio se origina en Afganistán, se procesa en Turquía, y se distribuye en Europa, por albaneses, o en Albania o en Kosovo - básicamente el KLA, el Kosovo Liberation Army apoyado fuertemente por Occidente. Sibel dice que al portavoz del Congreso, Dennis Hastert, le han dado maletas de dinero en su casa, cerca de Chicago, procedente de turcos, a sabiendas de ser dinero de la droga.

En el año 2003, el periodista italiano Maurizio Blondet publicó un libnro titulado 11 settembre: colpo di stato (Milan, Effedieffe, 2002). Con el paso del tiempo otros observadores han aceptado que el 9/11 fue un golpe de estado encubierto, por ejemplo Gore Vidal.

Ed Encho, sugiere que con el golpe se pretendía introducir, sin debate y sin ser percibido, Órdenes Ejecutivas sobre la "Continuidad del Gobierno" (COG). Sin lugar a dudas, como reconoce la Comisión del 9/11, COG, fue el fruto de dos décadas de colaboración secreta entre Cheney y Rumsfeld, y fue implementado el 9/11.

Los escépticos pueden decir que hay un Congreso, con poderes constitucionales para controlar al Ejecutivo. Pero, un comité conjunto del Congreso, en el 2002, investigó las actividades de la CIA y el FBI antes del 9/11. Una parte del informe emitido, que trataba de las relaciones entre los gobiernos saudíes y la CIA, con el supuesto secuestrador al-Mihdar, fue clasificado y ocultado por la administración. Cuando la información se filtró a Newsweek, los miembros del comité fueron investigados por el FBI, en lugar de investigar al gobierno saudí.

Las implicaciones constitucionales de este estado de emergencia por la Directiva presidencial sobre Seguridad Nacional, (NSPD)-51, de 9 de Mayo 9 del 2007, que decretó (sin una nota de prensa) que cuando el Presidente determine que se ha produicido una emergencia catastrófica, el Presidente puede entonces asumir todas las funciones gubernamentales y dirigir todas las actividades del sector privado, para asegurar que saldremos de la emergencia con un "gobierno constitucional duradero."
Solo el Washington Post informó de la NSPD-51, señalando que se formalizaba un desplazamiento de la autoridad desde el Departamento de Interior a la Casa Blanca.

El Congresista Peter deFazio intentó ver los planes del COG (Continuidad del Gobierno) y los Apéndices clasificados del NSPD-51. Tanto a él como a todo el Comité del Congreso sobre Seguridad Interior, les fue negado el acceso a estos apéndices, arguyendo que el Comité no tenía los permisos necesarios. Esta historia fue ignorada por los medios dominantes.

Lo que está en juego son los poderes constitucionales de control del Congreso y unos planes que podrían usarse para suspender la Constitución. El Congreso renuncia a ejercer sus poderes constitucionales.

¿Qué pueden hacer los Americanos corrientes para defenderse? Por ejemplo pedir a todos los candidatos:

a) Revisar la Military Commissions Act de 2006, para restaurar el habeas corpus, dentro de los límites de la Constitución de los EEUU.
b) Prohibir la tortura.
c) Restringir la vkigilancia electrónica sin mandato judicial de la Protect America Act del 2007.
d) Votar la American Freedom Agenda Act del 2007 (H.R. 3835), que trataba estos y otros asuntos. Esta ley fue introducida por el congresista Ron Paul el 15 de octubre del 2007.
e) Innsistir en el derecho del Congreso a revisar los apéndices del COG a la (NSPD)-51.
e) Apoyar una ley que fuerce a las agencias gubernamentales a colaborar con los National Archives, en cumplimiento de la petición de la Comisión del 9/11 para que se liberen todos los documentos sobre el 9/11 en el 2009.