Solzhenitsyn

“Los dirigentes bolcheviques que tomaron Rusia no eran rusos, ellos odiaban a los rusos y a los cristianos. Impulsados por el odio étnico torturaron y mataron a millones de rusos, sin pizca de remordimiento… El bolchevismo ha comprometido la mayor masacre humana de todos los tiempos. El hecho de que la mayor parte del mundo ignore o sea indiferente a este enorme crimen es prueba de que el dominio del mundo está en manos de sus autores“. Solzhenitsyn

Izquierda-Derecha

El espectro político Izquierda-Derecha es nuestra creación. En realidad, refleja cuidadosamente nuestra minuciosa polarización artificial de la sociedad, dividida en cuestiones menores que impiden que se perciba nuestro poder - (La Tecnocracia oculta del Poder)

jueves, 24 de abril de 2014

COMO NOS PROVOCAN CANCER CON LAS AGUAS DEL GRIFO Y ALGUNAS EMBOTELLADAS



Las autoridades sanitarias saben que desinfectar las aguas con Hipoclorito de sodio (Lejía), provoca cáncer por culpa de los Trihalometanos que se originan con este maldito desinfectante (ver también cloro y salud).

Pero qué curioso que en los Países líderes en industria farmacéutica, Alemania, Suiza, Austria y E.E.U.U. se esté dejando de utilizar el Hipoclorito de sodio para la desinfección de sus aguas y se esté sustituyendo por el Dióxido de Cloro, para evitar precisamente una de las causas de cáncer en sus poblaciones a través de los Trihalometanos.

Qué curioso es que en España nuestras autoridades mantengan en secreto esta aplicación, cuando es legal para desinfección de aguas y además seamos pioneros en prohibir el Dióxido de cloro en usos medicinales para humanos, cuando la Unión Europea ya lo ha autorizado para Esclerosis Lateral Amiotrófica.

Qué curioso que lo que prohíben para uso humano sea autorizado para el resto de mamíferos irracionales y tengamos que utilizar la vía veterinaria para curarnos de enfermedades graves como SIDA, Hepatitis C, algunos cánceres, Malaria, etc. (ver propiedades medicinales del MMS).

El fascismo actual ya no necesita gasear violentamente a la gente que le estorba, utiliza los mismos y parecidos gases, pero de forma más sibilina, dejando que actúen a largo plazo, para así disimular y encubrir la responsabilidad de los asesinos. O bien impiden que se usen productos de bajísimo coste , como es el caso del Dióxido de Cloro, para enfermedades graves.

Estos asesinos tienen en sus casas sofisticados sistemas de filtraje de sus aguas para evitar las enfermedades que la mayoría de ciudadanos están expuestos y utilizan, no os quepa ninguna duda, el Dióxido de Cloro, para lo que les haga falta.

Por esto sería tan necesario que se movieran iniciativas a nivel municipal para sustituir el Hipoclorito de sodio por el Dióxido de Cloro para desinfectar las aguas que bajan por nuestros grifos.

Las autoridades sanitarias municipales por suerte y especialmente las de los pequeños municipios están al margen de estas maniobras genocidas y pueden reaccionar con rapidez, logrando no solo unas aguas menos contaminadas de sustancias indeseables, sino próximas a aguas con virtudes medicinales.

Otro producto peligrosísimo e innecesario que se añade a las aguas de grifo por desconocimiento, es el Flúor.

Una alternativa más costosa pero igualmente rentable para el ciudadano es invertir en filtros de ósmosis inversa. Actualmente ya hay en el mercado modelos para consumo domestico muy económicos que hacen que su inversión se amortice en un año debido al ahorro de aguas embotelladas.

Porque hay que conocer que un 25% de aguas embotelladas son simplemente aguas de grifo a precio de oro y con el inconveniente de poder contener Bisfenoles (otro producto que ocasiona graves problemas de salud) originados por el material plástico de las botellas.

Si no comprendemos la dinámica maligna del negocio del agua ( por cierto dominada a nivel mundial por Coca Cola, Pepsi Cola, Nestlé y Danone) aceptaremos como normal el desprestigio del agua del grifo, para caer en las garras de las embotelladoras que utilizan muchas de ellas agua de igual o peor calidad.

Iniciativas municipales de desinfección de las aguas de grifo con Dióxido de Cloro y dejar de añadir Flúor, es una de las alternativas. Y si queremos beber la mejor agua posible, complementar con un pequeño sistema de filtraje por osmosis inversa se hace necesario.

Fuente.

lunes, 21 de abril de 2014

Cómo legalizar cualquier fenómeno


© Wikimedia

En la actual sociedad de la tolerancia, que no tiene ideales fijos y, como resultado, tampoco una clara división entre el bien y el mal, existe una técnica que permite cambiar la actitud popular hacia conceptos considerados totalmente inaceptables. Esta técnica, llamada 'la ventana Overton' y que consiste en una secuencia concreta de acciones con el fin de conseguir el resultado deseado, "puede ser más eficaz que la carga nuclear como arma para destruir comunidades humanas", opina el columnista Evgueni Gorzhaltsán. 

En su artículo en el portal Adme, pone el ejemplo radical de cómo convertir en aceptable la idea de legalizar el canibalismo paso a paso, desde la fase en que se considera una acción repugnante e impensable, completamente ajena a la moral pública, hasta convertirse en una realidad aceptada por la conciencia de masas y la ley. Eso no se consigue mediante un lavado de cerebro directo, sino con técnicas más sofisticadas que son efectivas gracias a su aplicación coherente y sistemática sin que la sociedad se dé cuenta del proceso, cree Gorzhaltsán.

Primera etapa: de lo impensable a lo radical
Obviamente, actualmente la cuestión de la legalización del canibalismo se encuentra en el nivel más bajo de aceptación en la 'ventana de posibilidades' de Overton, ya que la sociedad lo considera como un fenómeno absurdo e impensable, un tabú.

Para cambiar esa percepción, se puede, amparándose en la libertad de expresión, trasladar la cuestión a la esfera científica, pues para los científicos normalmente no hay temas tabú. Por lo tanto, es posible celebrar, por ejemplo, un simposio etnológico sobre rituales exóticos de las tribus de la Polinesia y discutir la historia del tema de estudio y obtener declaraciones autorizadas sobre el canibalismo, garantizando así la transición de la actitud negativa e intransigente de la sociedad a una actitud más positiva.

Simultáneamente, hay que crear algún grupo radical de caníbales, aunque exista solo en Internet, que seguramente será advertido y citado por numerosos medios de comunicación. Como resultado de la primera etapa de Overton, el tabú desaparece y el tema inaceptable empieza a discutirse.

Segunda etapa: de lo radical a lo aceptable
En esta etapa, hay que seguir citando a los científicos, argumentando que uno no puede blindarse a tener conocimientos sobre el canibalismo, ya que si alguna persona se niega a hablar de ello será considerado un hipócrita intolerante.

Al condenar la intolerancia, también es necesario crear un eufemismo para el propio fenómeno para disociar la esencia de la cuestión de su denominación, separar la palabra de su significado. Así, el canibalismo se convierte en 'antropofagia', y posteriormente en 'antropofilia'.

Paralelamente, se puede crear un precedente de referencia, histórico, mitológico, contemporáneo o simplemente inventado, pero lo más importante es que sea legitimado, para que pueda ser utilizado como prueba de que la antropofilia en principio puede ser legalizada.

Tercera etapa: de lo aceptable a lo sensato
Para esa etapa, es importante promover ideas como las siguientes: "el deseo de comer personas está genéticamente justificado", "a veces una persona tiene que recurrir a eso, si se dan circunstancias apremiantes" o "un hombre libre tiene el derecho de decidir qué come".

Los adversarios reales a esos conceptos, es decir, la gente de a pie que no quiere ser indiferente al problema, intencionadamente se convierten para la opinión pública en enemigos radicales cuyo papel es representar la imagen de psicópatas enloquecidos, oponentes agresivos de la antropofilia que llaman a quemar vivos a los caníbales, junto con otros representantes de las minorías.

Expertos y periodistas en esta etapa demuestran que durante la historia de la humanidad siempre hubo ocasiones en que las personas se comían unas a otras, y que eso era normal.

Cuarta etapa: de lo sensato a lo popular
Los medios de comunicación, con la ayuda de personas conocidas y políticos, ya hablan abiertamente de la antropofilia. Este fenómeno empieza a aparecer en películas, letras de canciones populares y vídeos. En esta etapa, comienza a funcionar también la técnica que supone la promoción de las referencias a las personajes históricos destacados que practicaban la antropofilia.

Para justificar a los partidarios de la legalización del fenómeno se puede recurrir a la humanización de los criminales mediante la creación de una imagen positiva de ellos diciendo, por ejemplo, que ellos son las víctimas, ya que la vida las obligó a practicar la antropofilia.

Quinta etapa: de lo popular a lo político
Esta categoría supone ya empezar a preparar la legislación para legalizar el fenómeno. Los grupos de presión se consolidan en el poder y publican encuestas que supuestamente confirman un alto porcentaje de partidarios de la legalización del canibalismo en la sociedad. En la conciencia pública se establece un nuevo dogma: "La prohibición de comer personas está prohibida."

Esta es una técnica típica del liberalismo que funciona debido a la tolerancia como pretexto para la proscripción de los tabúes. Durante la última etapa del 'movimiento de las ventanas' de Overton de lo popular a lo político, la sociedad ya ha sufrido una ruptura, pues las normas de la existencia humana se han alterado o han sido destruidas con la adopción de las nuevas leyes.

Gorzhaltsán concluye que el concepto de las 'ventanas de posibilidades', inicialmente descrito por Joseph Overton, puede extrapolarse a cualquier fenómeno y es especialmente fácil de aplicar en una sociedad tolerante en la que la llamada libertad de expresión se ha convertido en la deshumanización y donde ante nuestros ojos se eliminan uno tras otro todos los límites que protegen a la sociedad del abismo de la autodestrucción.

Fuente.

Cualquier parecido con el camino a la legalización de las drogas, la pedofilia, la homosexualidad, el matrimonio homosexual, la adopción de parejas homosexuales, el aborto y mil temas más es pura coincidencia.