Solzhenitsyn

“Los dirigentes bolcheviques que tomaron Rusia no eran rusos, ellos odiaban a los rusos y a los cristianos. Impulsados por el odio étnico torturaron y mataron a millones de rusos, sin pizca de remordimiento… El bolchevismo ha comprometido la mayor masacre humana de todos los tiempos. El hecho de que la mayor parte del mundo ignore o sea indiferente a este enorme crimen es prueba de que el dominio del mundo está en manos de sus autores“. Solzhenitsyn

Izquierda-Derecha

El espectro político Izquierda-Derecha es nuestra creación. En realidad, refleja cuidadosamente nuestra minuciosa polarización artificial de la sociedad, dividida en cuestiones menores que impiden que se perciba nuestro poder - (La Tecnocracia oculta del Poder)

lunes, 15 de septiembre de 2014

Los amos del dinero


Este documental relata como fue la lucha por el control de la emisión de la moneda norteamericana, que finalmente dio lugar al establecimiento en 1913 del Federal Reserve Bank (FED), banco privado (en apariencia gubernamental) que monopoliza la emisión del dólar y las reglas monetarias de ese país, y que actualmente tiene dominio del circuito financiero mundial.

Revela la trama oculta que dio lugar a independencias, guerras, ciclos económicos y control político. El enfoque crítico y bien fundamentado permite comprender la crisis actual del capitalismo y la monstruosa deuda que encadena Estados, empresas y particulares en el presente.

Material esencial para aquellos que creemos que un cambio del sistema social, económico, político e ideológico ES POSIBLE.

Todas las respuestas a cómo se genera el dinero y a quiénes lo controlan. Este pequeño grupo sin escrúpulos, que ha dominado el flujo de dinero del planeta desde la antigüedad, sigue actuando amparado por las leyes impuestas por los políticos que ellos mismos apoyan y promocionan.

Lo más gracioso es que para dominar el mundo ni siquiera hace falta ser muy inteligente, sólo tienen que controlar el flujo del dinero, y las instrucciones para lograr esto que es muy sencillo, supongo que se lo dicen los padres a sus hijos en media hora.

Casi seguro que para que los retoños lo comprendan les enseñan la foto de un grifo, para que puedan ver como el caudal de agua va disminuyendo a medida que lo van cerrando. Cuando sale muy poca agua y la población mundial no tiene ni siquiera para beber, entonces los amos del dinero ofrecen soluciones que, aunque desagradables, son las únicas que pueden restaurar el caudal de agua necesario para que el planeta pueda saciar su sed. La población angustiada por la sed, asume los sacrificios puesto que no vislumbra otra solución mejor.

LOS AMOS DEL DINERO
(The money masters)

Si lo quieren ver, aquí lo tienen, y en un formato muy bueno. Es del año 96, y verán que acierta en todo lo que acabó ocurriendo. Y verán también que lo que ahora sucede no es nuevo, puesto que ya ocurrió otras veces. El director y presentador se llama Bill Still.

En 1982 Ronald Reagan estudió la posibilidad de volver al patrón oro para reestablecer el equilibrio en las finanzas. Encargó un estudio a una comisión, y cual sería su sorpresa cuando esa comisión recibe un escrito del Tesoro diciendo que la Institución no tiene ningún oro, y que todas las reservas de ese metal están en manos de la FED, que lo tiene en garantía por el dinero prestado al Estado (luego veremos que tampoco la FED lo tiene, porque lo vendió, además a bajo precio).

Tal es el poder que tienen los amos de la FED, que un neoliberal como Milton Friedman (al decir de la izquierda, no así de liberales de la escuela austríaca), acusó a la Reserva de provocar consciente o inconscientemente las tres contracciones económicas de entreguerras y criticó el que tan pocas personas sin ningún control político concentren un poder tan enorme.

Tras la primera guerra mundial y a iniciativa de los grupos bancarios se organizan las primeras instituciones que con el paso del tiempo darían lugar al Banco Mundial, al Tribunal Internacional de La Haya y a las Naciones Unidas (es decir: un poder financiero, un poder judicial y un poder legislativo que cuando convenga se utilizarán para dar cobertura legal a sus actos, y cuando no convenga se lo saltarán a la torera. Como el Derecho Alternativo en España, vamos).

Este documental peca de reduccionismo, al querer explicar todo el transcurso histórico desde los intereses de los banqueros. Digo esto porque no aborda, una vez más, y como hacen todos los documentales y la mayor parte de los estudios, los problemas de financiación de un imperio, en este caso el de los Estados Unidos. Sin embargo resulta vital para entender cómo los banqueros no pueden colocarse al margen del poder político por temor a que peligren sus negocios, de ahí que con el inmenso poder que tienen busquen manejar la acción política cuanto pueden.

Unas reflexiones iniciales

Cabe sospechar que detrás de toda la expansión crediticia habida en España está el intento de destruir la banca pública, las cajas; dejo aparte el sometimiento y la pérdida de soberanía de España, ya que según el viejo lema solo hay dos maneras de someter a un país: invadiéndolo o endeudándolo. Cabe recordar también que el Banco de España era una institución política para controlar a los bancos, de tal manera que en España se podía decir que los banqueros privados eran agentes de intermediación entre el Banco de España (el Estado) y los depositantes o solicitantes de los servicios financieros. Bien diferente a cuando las finanzas públicas han de pasar a la fuerza por manos privadas, caso del Tesoro de los Estados Unidos con respecto a la FED, ya que la FED compra la deuda del Estado y cobra por ello, y por si fuera poco emite el dinero tomando como respaldo los bonos del Tesoro; es decir: que no solo tiene en sus manos al Estado sino que además lo usa para su negocio.

El documental, como digo, no toma en cuenta las necesidades de financiación de los Estados Unidos, extraordinarias y con frecuencia imposibles de prever, pero lo cierto es que el poder que tienen en sus manos los banqueros que manejan la FED podría desarrollarlo el Estado sin necesidad de plegarse a los intereses de la Reserva Federal, la cual antepondrá los intereses privados de sus dueños a los intereses nacionales.

Cada dólar que emite la FED es un dólar que le adeuda el Tesoro y que le tiene que pagar con los impuestos que recauda; como nunca alcanza entonces la FED le da los dólares que necesita a cambio de bonos de deuda, sobre los cuales la FED aplica la reserva fraccionaria multiplicando por diez el valor de los bonos. Lo mismo hacen los demás bancos privados. Es decir: si un banco tiene cien dólares y los presta a un 5% anual no gana 5 dólares al año, sino 50, gracias precisamente a la reserva fraccionaria.

La disculpa que dan en la FED es que al ser la Reserva una institución independiente del Estado, vigila mucho mejor los procesos inflacionistas en los que podría incurrir un gobierno que no estuviese vigilado de cerca por los intereses particulares de los banqueros. La historia de la banca y sus banqueros demuestra que eso no es siempre así, puesto que de la misma manera que el político puede incurrir en excesos también lo pueden hacer los banqueros, solo que en este caso en beneficio exclusivamente de sus bolsillos. Es decir: el gran debate se centrará en si el negocio de los banqueros evita los costes del populismo y de la demagogia de los políticos, y la respuesta sería "no siempre", puesto que ni el político está obligado a ser un irresponsable ni el banquero mira por otras razones que se antepongan a sus intereses.

Comienza el documental haciendo una pregunta: 
“¿por qué nuestros salarios [de los norteamericanos] no alcanzan para llegar a fin de mes y estamos tan endeudados? ¿Por qué los políticos no controlan la deuda?”.
Era el año 1996. Respuesta: “El problema es que desde 1864 tenemos un sistema bancario basado en deuda. Todo nuestro dinero está respaldado por la deuda estatal y es imposible solucionar el problema de la deuda sin cambiar el sistema bancario y monetario”.
“El problema es que la FED es un banco privado, un banco con accionistas privados y que, como es lógico, funciona para la ganancia de sus accionistas, los banqueros”
“Pero la FED ni es federal ni tiene reservas, fue creada por medio de un engaño en el Congreso en el año 1913” 
Prometieron a los senadores que no aprobarían nada hasta la vuelta de las vacaciones de Navidad; al regreso ya estaba todo hecho. Por cierto: hace unos años Aaron Russo hizo un documental tratando de buscar alguien que le mostrara dónde existe la ley que obligue a los ciudadanos a pagar el impuesto sobre la renta. Porque sí que hay leyes que dicen cuánto tienen que pagar, pero ninguna que obligue a pagarla. Solo encontró algunos congresistas que le dijeron que tal ley no existe, puesto que se necesitaría una reforma constitucional que nunca se quiso abordar. (La patria de la seguridad jurídica y de la libertad individual, al decir de tantos. Recuerden también que el fisco de los Estados Unidos tiene sus propias unidades de policía, paralelas al FBI).

Observen que la FED se crea justo cuando está en ciernes la primera guerra mundial, así que los banqueros aprovechan para hacer sus ganancias emitiendo el dinero que el Estado le adeudará y que de todas formas tendría que emitir el Estado si no estuvieran ellos por el medio.
“La mayoría de los congresistas no entienden el funcionamiento de la Reserva Federal, y los que sí lo entienden, tienen miedo de contarlo”. 
Ningún congresista se dejó entrevistar para hablar de la FED, y algunos que se habían comprometido les dieron plantón.

Woodrow Wilson, que fue el presidente bajo cuyo mandato se instituyó la Reserva Federal (después de darle vueltas para buscarle un nombre que no pusiera en evidencia que la FED es una corporación en manos de banqueros particulares), reconoció en 1924 que había hecho un daño inmenso a la nación, y que no había empresario norteamericano por poderoso que fuera que no temiera decir en público lo que pensaba sobre la FED:
"Ellos saben --dijo Wilson-- que existe un poder tan organizado, sutil, vigilante, unido, penetrante, que es mejor no hablar ni en susurros cuando desearían dirigir palabras de condena a ese algo". 
Los periódicos, controlados por la banca, celebraron el día en que se aprobó el funcionamiento de la Reserva Federal diciendo que a partir de ese momento las crisis se podrían prevenir con antelación
"cuando en realidad --como dice el director del documental-- lo que iba a ocurrir es que las crisis serían agudizadas e incluso creadas cuando más interesaran a los banqueros".
El primero que hizo frente al ‘engaño’ (es un engaño a los norteamericanos, sin duda) fue el padre del aviador Lindberg, en el año 1923; también McFadden, en 1932, en plena depresión. También Barry Goldwater, quien dijo que la FED nunca había sido auditada y funcionaba sin inspección ni del Gobierno ni del Congreso (en ello continúan, puesto que Ron Paul lleva años exigiendo una auditoría, y en la visita que le concedieron no le dejaron ver nada de sus manejos internos ni tampoco comprobar la existencia de las supuestas reservas de oro que alberga Fort Nox).

Ya los fundadores de la nación sabían de lo que había ocurrido con el Banco de Inglaterra, y que fue el causante de la revolución (más abajo se lo cuento). Por tanto, esta batalla para ver quién controla la emisión de dinero ha sido una constante a lo largo de la historia de los EEUU, tan es así que ese poder para que los bancos privados pudieran emitir moneda existió y se anuló ocho veces desde 1764.

Hace también un repaso histórico desde los orígenes de la banca. Recuerdan en el documental la violencia de Jesús de Nazaret cuando expulsó a los mercaderes del Templo, en realidad cambistas, que monopolizaban el siclo (séqel en hebreo, shequel o shekel actualmente), la única moneda, entonces de plata, admitida por los sacerdotes como contribución de los judíos al Templo y que tenían que comprar con monedas romanas. Gracias a ese monopolio los cambistas se hacían con enormes sumas de dinero, de ahí que el Hijo del carpintero la emprendiera a golpes con ellos "por violentar la santidad de la Casa de Yahvé". Claro, ¿qué libertad de mercado era aquella donde si quieres ganarte el favor de Yahvé tienes que pagarle al cambista lo que él te exija?

Un paréntesis para otra reflexión más: si vamos al patrón oro --y hay muchos que sospechan que va a ser así, tras la destrucción del euro y sobre todo del dólar-- la primera pregunta obligada a la que deberían responder los partidarios de ese modelo es esta: ¿en manos de quiénes están las 150 mil toneladas de oro que se calcula hay actualmente? Es una pregunta que nadie se hace y a la que los partidarios del patrón oro deberían responder, porque igual nos llevamos la sorpresa de que la mayor parte está en manos privadas. Según dicen en el documental 2/3 están en manos de los bancos privados, aunque con apariencia de públicos, caso por ejemplo del FMI o del BM, a decir de quienes dirigen ese documental. No me extraña que muchos inversores no acepten papeles y solo el oro físico, tangible, por temor a que se esté aplicando una reserva fraccionaria sobre el oro existente y de ese modo formando otra burbuja especulativa; no en vano quienes inventaron ese sistema fueron los propios fundidores de oro.

Estos problemas de los judíos con sus cambistas también los tuvieron los romanos con los suyos. Y ya ven cuánta ignorancia y prejuicio hay detrás de ese infundio que asocia judío con avaro, como si todos los judíos fueran lo mismo, olvidando que Jesús de Nazaret era zelote y se enfrentó a los cambistas, también judíos.

Cuando Julio César puso en manos del Estado la acuñación de moneda, dejó a los cambistas fuera de juego, y al decir de muchos, según cuentan en el vídeo, es posible que estuvieran detrás de su asesinato, puesto que nada más morir recuperaron su poder y la moneda se devaluó. 

La revolución americana
Sorprendidos por la prosperidad en América, los ingleses le preguntaron a Benjamin Franklin cómo lo hacían. Este les contó que emitían moneda fiat (sin respaldo en oro), pero justo la que necesitaba el comercio y la industria. El banco de Inglaterra, privado, presionó para que Inglaterra prohibiese la emisión de moneda en las colonias, y en 1764, además de prohibirlo, exigió el pago de los impuestos en oro y plata, y no como hasta entonces, que se podían pagar en especie.

Tras la independencia, nuevamente, con dinero público, se montó un banco privado --y aunque el 80% de la acciones estaban en manos privadas el dinero era público-- y comenzó a prestar por el método de la reserva fraccionaria.

Verán también cómo un solo individuo, uno de los Rothschild, fue capaz de hundir el banco de Inglaterra en plena guerra con Napoleón. Por tanto lo de la nueva economía tan mitificada, y por la cual un individuo como Soros pudo poner en jaque a la libra, no es nuevo. Claro que hay quien dice, y posiblemente con razón, que Soros solo es un testaferro. Algo parecido ocurrió con JP Morgan, que se pensaba que era el hombre más rico del mundo tras la primera guerra mundial y luego se descubrió que solo era dueño del 19% de las acciones del banco, el resto lo controlaba la familia alemana, o mejor dicho de origen alemán, porque el dinero no entiende de patrias. Lo mismo hicieron los Rothschild con Napoleón y con sus enemigos, puesto que financiaron a todos. Tras la batalla de Waterloo, uno de los Rothschild pasó a controlar la bolsa y el banco de Inglaterra al hacer caer la acciones simulando que Napoleón había ganado la batalla y comprándolas pocas horas después a precio de saldo. Hace pocos años la familia Rothschild llevó a los tribunales al autor de un libro donde se explicaba esto, pero los tribunales sentenciaron a favor del escritor.

Von Bismarck, que unificó los estados alemanes, dijo que la división de los norteamericanos entre 'unionistas' y confederados fue alentada por la banca europea. Lincoln reconoció siempre que para él lo importante era salvar la Unión, y si para ello tenía que abolir la esclavitud o por el contrario defenderla, lo haría. La proclamación de la libertad de los esclavos se produjo una vez empezada la guerra, y solo en los Estados del sur, los cuales se habían rebelado al no permitirles los Estados del norte el libre comercio con Europa y el resto del mundo, lo cual encarecía sus importaciones al paso que restringía las exportaciones de algodón.

Los banqueros ofrecieron a Napoleón III el dinero necesario para invadir México y ayudar a los Estados del sur, mientras que a Lincoln, cuando les pidió ayuda, le ofrecieron los créditos entre un 24% y un 36%. Lincoln, obviamente, lo rechazó, y solicitó al Congreso la aprobación de un banco público que emitiera moneda. Eso y la industria del norte hizo que los banqueros se plegaran a las órdenes de Lincoln, pero a cambio de no cobrar intereses le exigieron que dejara de emitir moneda y les concediera a ellos ese poder en régimen de monopolio. Así se crearon de nuevo bancos privados con capacidad de emitir, pero no con apoyo de los capitales privados sino con bonos del Estado (similar a la expansión monetaria que ahora hace la FED, que emite dólares sin respaldo en oro, y lo hace para comprar los bonos del Tesoro, los cuales toma como activos para prestar dinero mediante la reserva fraccionaria; bonos del Tesoro que se respaldan con los activos del Estado, los cuales, a su vez, tienen como valor subyacente los impuestos presentes y futuros que recaudará el Estado).

A partir de la muerte de Lincoln, y tras establecer el patrón oro y prohibir las monedas de plata (la plata era quince veces más abundante y por tanto más difícil de monopolizar), Estados Unidos nunca más pudo volver a emitir moneda libre de deuda. Primero los banqueros provocaron una hiperinflación para que el pueblo asumiera que el dinero debería estar respaldado en oro, y luego, tras acaparar el metal y fundir las monedas de plata previa compra del voto a los congresistas --y eso está documentado-- restringir el dinero en circulación y por tanto encarecer el dinero.

En 1891 un documento interno de la asociación de banqueros llamaba a cortar el crédito en 1894 y exigir el reembolso de los préstamos realizados (entonces podía hacerse, y lo mismo en 1929, es decir: que si contraías un crédito, el banco, pasado un tiempo, podía exigirte el reembolso inmediato e íntegro del dinero prestado). La nota dice que de ese modo "nos haremos con dos tercios de las tierras al oeste del Misisipi y con grandes extensiones al este del río"; luego las venderían y convertirían a los agricultores en aparceros o arrendatarios, tal y como habían hecho en Inglaterra. Por esta razón los norteamericanos exigían que las monedas de plata volvieran a circular, ya que el oro lo acaparaban los bancos.

La FED y el banco de Inglaterra --no se sabe si conscientes del alcance que aquello podía tener; lo mismo ocurrió con Alemania cuando en plena guerra fletó un tren para trasladar a Lenin a Rusia-- financiaron la revolución rusa, a fin de cuentas, como ya sabían los Rothschild, el mejor negocio se hace con los gobiernos, ya que estos necesitan cantidades enormes de dinero que finalmente se pagan con impuestos; si además hay guerras, las deudas estatales aumentan exponencialmente, y ningún Estado se atreverá a quedarse sin crédito si antes no va cumpliendo sus pagos, los cuales no tienen por que ser en dinero. En su día la banca Rothschild francesa financió a Napoleón, al mismo tiempo la banca Rothschild inglesa lo hacía con Inglaterra, y la alemana con Alemania. (Recuerdo lo que me contó hace más de veinte años un amigo que había emigrado a Guatemala, nada sospechoso de izquierdismo: 
los políticos guatemaltecos son tan corruptos que vuelan puentes y líneas de ferrocarril y le echan la culpa a la guerrilla; de ese modo tienen justificación para pedir créditos a Estados Unidos. Una vez llegan los fondos, con el dinero que se destina a construir un puente, y que construirá una empresa americana, se podrían construir otros dos; todos esos dólares de más se los reparten entre los políticos y vuelven inmediatamente a cuentas privadas en bancos de los Estados Unidos, pero la deuda la tienen que pagar los guatemaltecos; así que los Estados Unidos por cada dólar que presta gana dos o tres).

Crisis del 29 y el peliculón del Fort Knox

Todos los banqueros se salvaron, ni uno se arruinó. Todos vendieron sus acciones y las pasaron a efectivo o a oro antes del derrumbe de la bolsa. En esa fecha del "martes negro" el banquero Baruch llevó a Winston Churchill a su despacho de Wall Street para impresionarlo mostrándole cómo provocaba el pánico en el piso inferior. Aquella inflación no fue generada por las necesidades de una guerra o para aumentar la protección social; única y exclusivamente fue una inflación provocada por el crédito, muy lejos de la creación de dinero que demandaba el comercio y la industria.

Tras el estallido la FED hizo lo contrario que ha hecho ahora; aumentó los tipos de interés y contrajo el crédito, reduciendo en un 30% la cantidad de dinero en circulación. Sin embargo gastaron miles de millones en rescatar a los bancos mientras los banqueros ya se habían puesto a resguardo comprando oro; al mismo tiempo que se prohibió la tenencia privada del mismo a los particulares.. En realidad era una confiscación, ya que quien no entregase el oro se arriesgaba a una condena de diez años de prisión y a una multa de diez mil dólares de los de entonces. He ahí el país donde la propiedad y la seguridad jurídica son inviolables desde siempre, no lo olviden.

El oro de los particulares fue pagado a 20,66 dólares la onza, y con la fanfarria propia del patriotismo se edificó Fort Knox. En 1937, un año después de acabar la construcción, comenzó el transporte del oro confiscado. Justo en ese momento el oro subió a 35 dólares la onza, pero solo los extranjeros podían vender el oro a ese precio, para los norteamericanos seguía vigente la ley anterior, y nunca podían comprar. Los banqueros, que antes del martes negro habían comprado oro, lo habían enviado a Inglaterra, de ese modo ahora vendían oro inglés a 35 dólares.

[NOTA: El documental centra toda la atención en la ganancia que obtienen los banqueros con la deuda pública de los Estados. De ahí a deducir, como deduce, que toda la economía y la política y la guerra se desarrollan solo cuando los banqueros dan el visto bueno, hay un abismo]

En 1996 dos tercios del oro del mundo estaba en manos de los bancos centrales. Al acabar la segunda guerra mundial en Fort Knox había 20 mil toneladas, aproximadamente un 70% de todo el oro del mundo. Desde 1953 no se ha realizado ninguna auditoría. A partir de 1971, y tras el final del patrón oro, Nixon permitió a los norteamericanos comprar y vender oro sin precio intervenido. Nueve años después la onza alcanzaba los 880 dólares. 

En 1974 el NYT publica una noticia en la que avisa de que se están liquidando las últimas partidas del oro que quedan en el fuerte. Tres días más tarde, la fuente, Louise Auchincloss Boyer, que fue secretaria personal durante muchos años de Nelson Rockefeller, muere al caer de un balcón desde un décimo piso. Esa noticia de la venta de oro, y que al parecer venía llevándose a cabo desde hacía años, no tiene continuidad, y nunca más se volvió a hablar del asunto.

Hace treinta y cinco años que se discute sobre ese oro; si realmente estuviera allí ¿qué problema habría en mostrarlo? No deja de sorprender que el mayor tesoro del mundo no se muestre a la vista de nadie. Será para preservar la seguridad jurídica y la libertad individual. Será.

Es la cuarta vez que suprimen el vídeo en youtube.

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